Recitado por mi amigo y poeta:
Francisco Valdez.
Confieso que siempre muero entre tus brazos
que me apago como vela consumiéndome
de amor.
A veces tiemblo porque el miedo me atosiga
y temo amor mio tanto perderte.
Confieso que quizás sin ti no soy nada
o tal vez aun no hubiese nacido.
Pero es tanto amor lo que siento
solo tú atrapas mis pensamientos.
Agoniza mi cuerpo entre tus brazos
cuando lentamente araño el cristal
de la pasión.
No tengo amor mio ningún miedo
cuando siento tanta dulzura,
ni a fundirme en la locura de morir de amor.
La oscuridad se hará eterna y el tiempo
será testigo,
tan solo contigo mi vida es todo tan bello.
Amándote más allá del pensamiento
suspira mi mundo
y no queda segundo que no agonice en ti.
Mi amor atraviesa ese vació que la distancia deja
cortando sus rejas y vuela junto a ti.
A veces recorro los pasadizos que la mente
tiene en su castillo y abro esos pestillos
que las puertas cierran ante mí,
en ellos siempre estas tu.
Amarte es morir dulcemente
y sufrir lentamente el estar lejos de ti,
el amor es barrera contra el tiempo y distancia.
Confieso que a momentos grito tu nombre al silencio
y quiero apresarte en mi cuerpo,
en mi pensamiento eternamente.
Esta agonía que prende muy adentro.
abrazando mi lamento, amarte es tan intenso.
Eres el aire que respiro el rumbo de mi destino
toda mi verdad.
Confieso que muero en tus brazos que mi alma
se estremece agonizando de tanto amor.
La intensidad de nuestro amor disminuye
mis funciones vitales haciendome desvanecer.
Confieso querer morir de amor
no hay muerte más dulce,
para mi corazón.
Autora:Lola mejides .Un duende.
(Safe Creative: #0808130086013)